2 de marzo de 2009

¿ ... y que pasó con aquella Crisis, ... ?


Queridos nietos, dejarme que os cuente como fueron aquellos años difíciles en los que en aquel verano del 2.008 vimos como se derrumbaba todo un sistema de bonanza y lujuria del dinero, amparado por nuestro querido sistema financiero y fortalecido por los tonos pastel de las operaciones inmobiliarias que nos ofrecían dinero fácil y barato, sobre todo barato.


Fueron años difíciles, sobre todo los dos siguientes, dónde la mayor crisis fue la de la confianza en nuestras posibilidades de recuperación personal. La información de los medios se sumaba en el día a día de nuestros momentos de descanso delante del televisor una vez acabada la jornada. Escuchábamos con miedo e impotencia en las reuniones de amigos y familiares, cuantos eran los caídos en acto de servicio y que se unían a las colas del desempleo; pensando quien sería el próximo, como si se tratará de los momentos de ignorancia, oscuros y de pánico vividos por el reo antes de la ejecución. Las carreras profesionales de los directivos se truncaban, no sólo por el quebranto económico que producía en las familias, sino por la ruptura y caída al vacío de todas las expectativas que se habían generado para desarrollarse profesionalmente.


Así estuvo el caos de confianza establecido en nuestras vidas durante un largo periodo de tiempo, en los que la gestión de la clase política en general no era capaz de buscar fórmulas magistrales para la solución del problema, fecundado por la falta de apreciación del problema y por la marginalidad y la excusa perfecta de estar inmersos en un paraíso globalizado, antecesor de épocas doradas.


Pero un día, todo aquello cambio querido nieto; aquel día ocurrió algo muy especial desde el amanecer hasta que el sol se ocultó por el horizonte; fue el día en que la actitud de todos nosotros fue capaz de superar a la incertidumbre del miedo, de la desconfianza y de la pérdida de valores en las que habíamos caído. Fue el día en el que el motor central de nuestro pensamiento, se propuso generar actitud positiva ante la situación, nos llenó de coraje y nos hizo unilateralmente implicarnos en el problema, para ser capaces de buscar la solución inmediata. Aquel día se generó la dosis de confianza necesaria para empezar el día con ilusión, dándolo todo, prestando nuestras energías para generar corrientes de opinión positivas, transmitirlas a todo aquel que se cruzaba por nuestro camino. Ante ello, todo empezó a cambiar, la luz del día iluminaba más que nunca, entrando en una primavera permanente donde florecían cada día aquellos pétalos que estuvieron años sin crecer por no dedicarles el tiempo, el cariño y el agua necesaria para que se recuperasen. Ahora estamos de nuevo con la ilusión que todo ser humano se merece, saliendo de una situación que gracias a aquel día tan especial, somos capaces de contarlo, de hablar de aquel oscuro pasado y de haber contribuido a que el caos fuese más corto de lo esperado; y sobre todo, a saber controlar el significado de una palabra que durante años nos hizo tanto daño por no entender realmente su significado literal; CRISIS (-situación dificultosa o complicada-) ...


Dificultosa y complicada, es cierto; ... pero no por ello dejar de ser una SITUACION (-disposición de una “cosa” respecto del lugar que ocupa-).




4 comentarios:

  1. ¡Qué razón tienes! creo que nos falta a veces responsabilidad individual sobre esta situación. Estoy convencida que nosotros si podemos cambiarlo.

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  2. Si bien es cierto que la confianza en uno mismo es capaz de ayudar al individuo a alcanzar sus metas tambien es cierto que requiere un entorno propicio para su menester.Tambien se podria buscar,pero no todo el mundo se encuentra en una situacion lo suficientemente favorable ya sea socio-economica o intelectual.Con esto lo unico que quiero comentar es que todas aquellas personas que hayan caido absorvidas por la crisis y que poco a poco se le van agotando los recursos van a necesitar mucho mas que una actitud positiva.Estamos inmersos en un sistema capitalista que no tiene barreras
    y que no conoce mas que el egoismo de las grandes multinacionales capaces de lo que sea ayudadas por goviernos,bancos y toda una maraña de intereses que nada tienen que ver con los nuestros,despues de todo esto todavia no creeis que el miedo la incertidumbre la desconfianza y la perdida de valores esta plenamente justificada.Hace mucho tiempo que se perdieron los valores de verdad los que te da la vida los que no somos capaces de valorar por que vivimos en nuestro mundo de prisas y en nuestra incosciencia.Yo voy mas alla y digo que no solo hay una crisis economica si no una crisis en el hombre.La amistad el respeto y el orden en su maxima expresion harian cambiar la situacion global.Pero acordemonos de que el hombre es como es y va en su naturaleza.

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  3. Para Anónimo, te agradezco la complicidad y te animo a aplicar "la sonrisa de los retos" para afrontar y solucionar esta situación. Un saludo. Juanma Padilla

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  4. Fantástico tu comentario Luis A. Riquelmen, a la vez que inteligente y cargado de frases coherentes. Hay mucho de cierto en tus palabras, que se notan claramente que están escritas desde el sentido común más pleno del hombre actual. Tu punto de vista en efecto es el de miles de personas que ven y sufren esta crisis desde la perspectiva individual y realista dél difícl día a día.
    En este caso Luis, aún compartiendo plenamente tus palabras, creo que debemos de esforzarnos en tratar de llenarnos de coraje y afrontar la situación en primera línea de batalla, con orgullo y esperanza. Todo ello unido a la confianza de quien tenga los valores tan preciados que tu comentas, entiendo que serviránde aliciente a contribuir a poner de manifiesta la solución de masas como arma arrolladora para la solución de conflictos.

    Mucho ánimo, y una vez más, gracias por tus comentarios. Un saludo, Juanma Padilla

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